Revisando el sistema de agua potable para detectar posibles vías de agua que van a la sentina, descubrimos que la bomba de agua a pedal, perdía. La cantidad justa como para pasar inadvertida, y al cabo de una semana derramar 5 litros de agua.
Con su paciencia ingenieril, Quique se abocó al desarme y decule del problema. Conclusión: Había que reemplazar los O-Rings y las 4 válvulas.
Por razones de costo/beneficio se decidió reemplazar la bomba, en lugar de repararla.
Ley de Murphy: "Cuando uno reemplaza una bomba existente por una exactamente igual, la nueva no entrará donde estaba la vieja". Luego de un brainstorming, apelamos a la escofina y después de ponerla y sacarla varias veces, quedó pipí cucú!
Una semana después de realizado el transplante, podemos dar de alta al paciente. Ni una gota en la sentina!
ResponderEliminarGracias Quique!